La radiación ionizante es un fenómeno omnipresente en nuestra vida cotidiana, y comprender cómo medimos y evaluamos su impacto en la salud es esencial para la seguridad y el bienestar de la sociedad.
En este artículo, nos explicaremos qué es un sievert (Sv), la unidad del sistema internacional de unidades (SI) utilizada para cuantificar la cantidad de radiación ionizante y sus efectos en la salud humana.
El sievert y su significado
El sievert, representado por el símbolo Sv, es la medida fundamental de la dosis de radiación y se centra en evaluar el riesgo estocástico para la salud. Pero, ¿qué significa realmente esto? En términos sencillos, el sievert mide el efecto sobre la salud de la exposición a niveles bajos de radiación ionizante, siendo crucial en dosimetría y protección radiológica.
La dosimetría es la ciencia que se ocupa de medir las dosis de radiación, mientras que la protección radiológica se centra en minimizar la exposición a la radiación para prevenir efectos adversos en la salud. En otras palabras, el sievert es nuestra herramienta para comprender y gestionar los riesgos asociados con la radiación.
Uso del milisievert (mSv)
El milisievert (mSv) es una unidad de medida de dosis de radiación utilizada comúnmente en lugar del sievert (Sv) cuando se trata de niveles de exposición más bajos. Un sievert equivale a mil milisieverts (1 Sv = 1000 mSv).
Dado que el sievert es una unidad relativamente grande, el milisievert se utiliza para expresar dosis de radiación más típicas en contextos médicos, industriales o ambientales.
Por ejemplo, las dosis anuales promedio de radiación natural que recibe la población general suelen medirse en milisieverts. Asimismo, en la evaluación de la radiación en exámenes médicos, como radiografías o tomografías, las dosis se expresan comúnmente en milisieverts.
Instrumentos de medición
La radiación ionizante, medida en sieverts, se evalúa con dosímetros. Dosímetros personales, como los termoluminiscentes y opticamente estimulados, registran la exposición individual. Los dosímetros de área, como las cámaras de ionización y películas, miden la radiación en entornos específicos. Finalmente, los dosímetros de bolsillo, como los de estado sólido y fibras ópticas, son portátiles para evaluar la exposición instantánea.
Un vistazo a la man-sievert
La Man-sievert, por otro lado, es una medida colectiva. Representa la suma de todas las cantidades individuales significativas de un grupo de personas durante un período específico. Esta unidad es esencial para evaluar el impacto acumulativo de la radiación en una población y proporciona información valiosa para las decisiones de política de salud pública.
Dosis equivalente
La dosis equivalente, expresada en sieverts, es una medida que indica la cantidad de radiación que recibe un tejido específico. Aunque menos directa que la dosis de radiación absorbida, la dosis equivalente es biológicamente más relevante.
Se calcula multiplicando la dosis absorbida por un factor de ponderación de la radiación, que varía según el tipo de radiación.
Este enfoque tiene en cuenta los diferentes efectos biológicos de distintos tipos de radiación, proporcionando una medida más precisa del impacto potencial en la salud. Es un ejemplo claro de cómo la ciencia trabaja arduamente para mejorar la evaluación de riesgos asociados con la radiación.
Dosificación para un individuo
Determinar la dosis de radiación efectiva para un individuo implica el uso del factor de peso del tejido. Este factor se aplica multiplicando la dosis equivalente en cada órgano por el factor de ponderación del tejido, que depende de la parte del cuerpo expuesta a la radiación. Este enfoque ofrece una evaluación más precisa de los riesgos para la salud en función de la ubicación de la exposición.
La unidad de medida para la dosis absorbida es el Grey (Gy), que representa la energía transmitida por radiación a los tejidos vivos.
Límites de exposición y salud humana
En muchos países, se han establecido límites estrictos para la exposición a la radiación, especialmente para profesionales que trabajan en entornos con radiación ionizante.
Por ejemplo, en algunos lugares, la radiación que recibe un profesional no puede superar los 20 milisieverts (mSv) al año, con un máximo de 100 mSv en un período de cinco años. Para la población general, el promedio anual se limita a 1 mSv, excluyendo tratamientos médicos.
Estos límites se establecen para prevenir efectos adversos en la salud humana. La exposición excesiva puede dar lugar al síndrome de radiación aguda (ARS), un conjunto de efectos negativos causados por la alta exposición a radiación ionizante durante un corto período. También conocido como enfermedad por radiación o envenenamiento por radiación, el ARS subraya la importancia de mantener niveles de exposición dentro de límites seguros.
Ejemplos concretos: desastres nucleares y dosis extremas
Los desastres nucleares han proporcionado ejemplos concretos de la importancia de comprender y respetar los límites de exposición.
Por ejemplo, en el accidente nuclear de Fukushima, los técnicos estuvieron expuestos a una asombrosa cantidad de 400 milisieverts por hora.
Por otro lado, en el caso más infame de Chernobyl, la estimación total de radiación se elevó a 80,000 sieverts, aunque algunas personas recibieron dosis significativamente más altas.
En otro incidente en Tokaimura, Hisashi Ouchi sufrió una exposición extrema de entre 10 y 20 sieverts, marcando la dosis más alta registrada en un ser humano. Estos casos sirven como recordatorios impactantes de los riesgos inherentes a la radiación y la importancia de medidas estrictas de seguridad.