Italia se convirtió en el primer país en cerrar por completo todas las centrales nucleares existentes y abandonar por completo la energía nuclear. Actualmente, Italia no cuenta con ninguna central nuclear en funcionamiento. Sin embargo, hubo planes para la construcción de centrales nucleares en el pasado.
En 1987, después del desastre nuclear de Chernobyl, Italia celebró un referéndum en el que los votantes rechazaron la energía nuclear y aprobaron una ley que establecía una moratoria nuclear. Como resultado, las cuatro centrales nucleares en construcción en ese momento (Caorso, Montalto di Castro, Trino Vercellese y Garigliano) nunca entraron en operación y su construcción fue detenida.
Desde entonces han dependido y dependen del petróleo y, sobre todo, del gas proveniente de Argelia y Rusia.
Vuelta a la energía nuclear
Sin embargo, en el 2009 Italia volvió a fijarse en la energía nuclear para producir electricidad.
Los gobiernos italianos y franceses firmaron un acuerdo para que las empresas francesas especializadas en el desarrollo nuclear (Areva, EDF) participen en la construcción de cuatro centrales nucleares de tercera generación en Italia.
El 12 de junio del 2011 se iba a celebrar un referéndum en Italia para reiniciar la inversión en energía nuclear. El actual Gobierno tenía un proyecto para comenzar las obras de cuatro centrales en 2013 y tenerlas plenamente operativas en 2020.
El plebiscito debía celebrarse tres meses después del desafortunado accidente nuclear de Fukushima en Japón. Debido al accidente de la central japonesa el pebiscito fue aplazado.
Segundo rechazo de la energía nuclear por parte de los italianos
Finalmente el referendum se realizó en junio de 2011.
El resultado del referéndum de Italia del 2011 demostró clarísimamente la repulsa de los ciudadanos italianos a la vuelta de la energía nuclear. El resultado fue un aplastante 94% de votos en contra del plan de regreso a la energía nuclear trazado por el gobierno de Berlusconi.
Finalmente, el gobierno italiano confirmó la decisión de abandonar la energía nuclear de manera definitiva. Desde entonces, Italia ha seguido confiando principalmente en fuentes de energía renovable y gas natural para cubrir sus necesidades energéticas.
Lista de las centrales nucleares desmanteladas
A continuación se muestran las centrales nucleares desmanteladas en Italia:
Central Nuclear | Ubicación | Inicio de operaciones | Cierre |
---|---|---|---|
Garigliano | Campania | 1964 | 1978 |
Latina | Lacio | 1963 | 1987 |
Trino Vercellese | Piamonte | - | - |
Caorso | Emilia-Romaña | - | - |
Montalto di Castro | Lacio | - | - |
Las últimas centrales en la lista, Trino Vercellese y Montalto di Castro, nunca entraron en operación debido a la decisión de Italia de abandonar la energía nuclear en 1987, por lo que no tienen fechas de inicio ni cierre.
Minas de uranio
Italia disponía de una mina de uranio ubicada en la localidad de San Giovanni in Sardinia, en la región de Cerdeña. La se llamaba "Bosco Pietroso" (también conocida como la mina de San Giovanni o la mina de Seruci) y se cerró definitvamente en el 1990.
Esta mina de uranio fue operada por una empresa estatal italiana llamada Società Nucleare Italiana (SNI). La extracción de uranio en la mina de Bosco Pietroso comenzó en la década de 1960 y continuó hasta 1990, cuando se cerró definitivamente.
Durante su operación, la mina de uranio de Bosco Pietroso fue una fuente importante de uranio para la industria nuclear italiana, proporcionando el material necesario para alimentar las centrales nucleares en funcionamiento en ese momento.
El cierre de la mina de uranio italiana fue el resultado de varias razones, incluyendo preocupaciones ambientales y de salud pública debido a la presencia de radiactividad y los riesgos asociados con la minería de uranio. También hubo consideraciones económicas, ya que la demanda de uranio disminuyó debido al desmantelamiento gradual del programa nuclear italiano.
Después del cierre de la mina, se llevaron a cabo operaciones de descontaminación y restauración ambiental para mitigar los impactos ambientales asociados con la actividad minera.